Descripción
Contenido neto: 200 g. Equivale a la dosis para 40 días de consumo para una persona
¿Qué es el Polen?
El polen es un polvillo fino producido por las plantas para generar la fecundación que originará la formación de nuevos frutos y semillas. Las abejas lo recolectan desde las flores de las plantas y los árboles formando coloridas cargas en sus patas traseras, y lo almacenan en las colmenas como su principal fuente de alimentación proteica.
Beneficios de consumir Polen
Su riqueza hace de este producto natural un estupendo complemento alimenticio, con gran participación en el mantenimiento de nuestra salud, ya que está compuesto por proteínas, fibra, azúcares, minerales, vitaminas A, D, E, C, B1, B2 y B6, y una gran cantidad de enzimas.
Consumir polen de abeja de forma regular estimula el sistema inmunológico previniendo el resfrío y reduciendo la fatiga; además ayuda a aumentar la resistencia física y reducir los estados de anemia. Gracias a sus propiedades para regular el sistema nervioso favorece la conciliación del sueño, disminuyendo el estrés y mejorando el descanso.
Es una excelente fuente de proteína para vegetarianos, ya que contiene más aminoácidos que los presentes en la leche, queso, carne y huevos.
Al mismo tiempo, es ideal para el tratamiento de la anemia, ya que es un catalizador de la producción de glóbulos rojos en el cuerpo. Muy bueno como tratamiento complementario para cuadros depresivos, ayuda al equilibrio vitamínico y es energizante.
Forma de consumo
Todos los días junto con la primera comida del día, consumir media cucharadita de té (5 gramos) de Polen. Hay muchas formas de comerlo, aquí te dejamos algunas:
– Moler los granos de polen y mezclarlo con media cucharadita de Miel
– Moler los granos de polen y espolvorearlo sobre frutas, yogurt, etc.
– Incorporarlo en tu batido matutino
– Remojar por un par de horas en yogurt, jugo o un poco de agua
Importante: Durante la primera semana de consumo, comenzar con dosis más bajas. Partir con la puntita de una cuchara de té e ir aumentando día a día hasta llegar a media cucharadita (5 gramos) en el transcurso de una semana. De esta forma se evitan posibles malestares estomacales leves.
NUNCA MEZCLAR EL POLEN CON ALIMENTOS CALIENTES NI SOMETERLO A CALOR. NO RECOMENDAMOS SU CONSUMO EN NIÑOS MENORES DE 5 AÑOS.